En algunos de los artículos que hemos publicado en este espacio ya hemos abordado diferentes aspectos de la Tarjeta Profesional de la Construcción. Sin embargo, como este tema sigue despertando ciertas dudas entre las personas que trabajan o aspiran a trabajar en este sector, hoy vamos a resolver una de las que más frecuentemente nos plantean: ¿esta tarjeta es obligatoria?
No era obligatoria hasta enero de 2012
En la actualidad, estar en posesión de la TPC es indispensable para cualquier trabajador que quiere desarrollar su profesión dentro del sector de la construcción.
Sin embargo, esta obligatoriedad no entró en vigor hasta enero de 2012, de ahí que hoy en día puedan seguir existiendo ciertas dudas sobre este aspecto.
Hasta dicha fecha, ninguna empresa de carácter público o privado podía solicitar esta tarjeta como requisito para acceder a un puesto de trabajo dentro del sector. E incluso los trabajadores que la hubieran obtenido, no tenían la obligación de presentarla físicamente siempre que pudieran demostrar su formación mediante otras vías como un certificado acreditativo de la realización de un curso.
A partir de ese momento, se introdujeron una serie de cambios laborales que afectaron al tema que hoy nos ocupa. Por un lado, la Cartilla Profesional pasó a ser sustituida por esta Tarjeta Profesional de la Construcción que sería emitida exclusivamente por la Fundación Laboral de la Construcción. Además, tendría carácter obligatorio para cualquier persona que quisiera acceder a un puesto de trabajo en este sector.
En la primera semana de su entrada en vigor, más de 1.000 Tarjetas Profesionales de la Construcción fueron expedidas en nuestro país y, desde entonces, su número no ha parado de crecer, y ya no tanto por su obligatoriedad sino también por todas las ventajas que ofrece estar en posesión de ella.
Recordemos las ventajas de la TPC
Ahora ya nos resulta muy familiar pero en un primer momento esta tarjeta llamó la atención tanto pos su aspecto como por su función.
Con un formato similar al carné de conducir, con foto y con los datos personales en la parte frontal, esta tarjeta pasó a ser una especie de carta de presentación acreditativa para los trabajadores de este sector. Entre las ventajas que aporta la Tarjeta Profesional de la Construcción destacan:
- Acredita que un trabajador ha recibido, al menos, una formación básica en materia de prevención de riesgos laborales de acuerdo con lo previsto tanto en el Convenio General del Sector de la Construcción como en el artículo 10 de la Ley 32/2006 que regula la subcontratación en el Sector de la Construcción.
- Acredita cualquier otra formación específica que puede haber recibido un trabajador relacionada con la seguridad y salud en el trabajo.
- Acredita la categoría profesional y la experiencia laboral que una persona tiene dentro del Sector de la Construcción.
- Certifica si un trabajador ha realizado los reconocimientos médicos estipulados por convenio y si es apto desarrollar la función propia de su categoría y puesto.
- Facilita el acceso a los servicios de la Fundación Laboral de la Construcción.
En definitiva, esta tarjeta reúne en un solo documento toda la información que un trabajador podría demostrar por otras vías, resultando así mucho más cómoda tanto para la empresa como para el trabajador.
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